El PP denuncia que el bipartito ha falseado el informe con el que impondrá unilateralmente el nombre Castellón en valenciano
El concejal Carlos Feliu revela que el informe jurídico estima dos de las alegaciones del Grupo Municipal Popular que no serán tenidas en cuenta a pesar de que se admite que el documento ha sido manipulado.
El concejal del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Castellón, Carlos Feliu, denuncia la “total falta de moral y la manipulación continuada e intolerable con la que el bipartito gobierna, puesto que continúa obsesionado con eliminar el castellano de la ciudad, admitiendo incluso que ha falseado el resultado de uno de los informes en los que basa su informe para cambiar de manera unilateral el nombre de Castellón exclusivamente en su forma valenciana”.
Feliu: “El concejal Ignasi García señala y estigmatiza a todo el que no piensa como él. Exigimos respeto y tiene la obligación de escuchar a todos los castellonenses»
Feliu valora así la postura del bipartito, que llevará el cambio del topónimo de Castellón a su forma exclusivamente en valenciano al pleno del próximo 29 de octubre, después de que haya anunciado que va a pasar el rodillo por encima de todas las alegaciones que se presentaron contra esta propuesta unilateral de PSPV y Compromís, lanzada sin consenso ni posibilidad de decisión por parte de los castellonenses. “Y lo que es más grave, habiéndose admitido por el área de Normalització Lingüística dos alegaciones, precisamente dos las presentadas por el Grupo Municipal Popular, en las que se admiten que el informe elaborado por el Ayuntamiento contiene errores de bulto”, subraya.
El informe jurídico elaborado por el Negociado de Normalización Lingüística admite que la denominación ‘Castellón’ “no tiene sus orígenes en ninguna guerra ni imposición por derecho de conquista. Por tanto, se admite que la castellanización de la sociedad ya había comenzado con anterioridad al siglo XVIII”. Por tanto, uno de los argumentos utilizados por PSPV y Compromís para justificar el cambio es “rotundamente falso”.
“Y también se estima la alegación relativa a la validez del certificado de acuerdo expedido por el Consell Municipal de Cultura, en el sentido que no se adoptó un acuerdo, sino que se formuló una declaración de apoyo al procedimiento y propuesta de cambio de la denominación del municipio”, recoge el informe jurídico. “Por tanto –continúa Carlos Feliu–, el expediente en el que PSPV y Compromís se basan para justificar el cambio de nombre a Castelló ha sido manipulado y falseado, precisamente en uno de los documentos más importantes, porque se comprobó que se calificó como acuerdo del Consell Municipal de Cultura lo que en realidad fue una declaración de apoyo a la propuesta de cambio de denominación, formulada por los miembros presentes y, además, en el turno de ruegos y preguntas, por tanto, sin ninguna validez en las mismas”.
“Tal es el grado de cinismo que, a pesar de haber pedido la opinión al Consell Municipal de Cultura para sustentar su intención de borrar la forma castellana del topónimo de la capital de La Plana, que desestiman el papel del órgano, calificándolo como consultivo, a pesar de su indudable valor, motivo por el cual incluyen el certificado de la votación, eso sí, falseado”, denuncia.
A pesar de todo ello, PSPV y Compromís van a seguir adelante con la aprobación del expediente para que Castellón pierda para siempre la ‘N’ de su nombre.
“Una vez más, el bipartito vuelve a actuar más acorde con un régimen totalitario, dictatorial y estalinista que como una democracia. Cualquier método les resulta válido para justificar sus fines, algo que no nos extraña, teniendo en cuenta que Compromís, principal impulsor del cambio de nombre de Castellón, está calcando el modelo de gestión que ya se vive en Cataluña, donde se adoctrina en las aulas, se reescribe la historia con total impunidad y sin ningún rigor, y se impone el catalán como única lengua, obviando que el castellano es una lengua cooficial de nuestra ciudad, y que convive con armonía con el valenciano, sin conflictos ni divisiones. Es Compromís quien alienta las pintadas e instalaciones de lazos amarillos, ondea las esteladas y desafía a las resoluciones de los tribunales de Justicia”, lamenta el edil del PP Carlos Feliu.
“Nos vamos a tolerar lecciones de democracia de quien la deforma a su antojo para obtener sus fines exclusivos. El concejal Ignasi García señala y estigmatiza a todo el que no piensa como él. Califica a la oposición de extrema derecha solo porque no pensamos como él. Exigimos respeto, porque no debería recordarle que él, desde su cargo de concejal, tiene la obligación de escuchar a todos los castellonenses, le hayan votado o no, porque son todos los vecinos de esta ciudad, los mismos a los que él ningunea, los que le pagan todos los meses su nómina. Es hora de que deje la situación de histeria y revanchismo en la que vive, y de que respete y acepte otras opiniones, tan válidas como las suyas, algo que desgraciadamente ya hemos visto que no han hecho durante estos cuatro años del ‘Pacte del Frau’, advierte.
“Castellón habla y siente en castellano y valenciano. Sin conflictos ni divisiones. No hay ninguna necesidad de perder la forma castellana del nombre de nuestra ciudad. Votamos rotundamente no a que Castellón solo se denomine en su forma valenciana, y nos comprometemos a que, si los castellonenses nos dan su apoyo en las próximas elecciones, volver a la forma bilingüe del topónimo de la ciudad”, concluye.