Sales se pregunta “¿dónde está Amparo Marco?” tras la visita del president Puig y el conseller Marzà a Castellón
El Partido Popular cuestiona el liderazgo de la alcaldesa socialista y evidencia “la bicefalia que gobierna la ciudad”
El concejal del Grupo Municipal Popular, Vicent Sales, se ha preguntado hoy si habrá que sustituir el conocido “¿dónde está Wally?” por “¿dónde está escondida la alcaldesa?” tras constatar que ya es la tercera vez consecutiva que el president de la Generalitat visita Castellón y “ni pisa el Ayuntamiento ni se entrevista con la alcaldesa que parece incapaz de interrumpir sus largas vacaciones salvo para prohibir la entrada del vicealcalde a su despacho”.
Además, los populares añaden que la sorpresa hoy “ya ha sido mayúscula” al comprobar que “el conseller de Educación, Investigación, Cultura y Deporte, el independentista Vicent Marzà” ha visitado el consistorio para reunirse con el alcalde en funciones, Enric Nomdedéu.
Así, “a la pelea por el despacho, hoy sumamos un nuevo desplante” según ha afirmado el edil popular después de comprobar que “un conseller valenciano, partidario de la independencia de Cataluña, aprovecha las vacaciones de la alcaldesa socialista para entrevistarse con el vicealcalde nacionalista y poner de manifiesto quién está gobernando en la ciudad”.
En este sentido, el edil popular lamenta que un conseller de origen castellonense haya sido noticia este verano “no por defender Castellón sino por abogar públicamente por la anexión de la Comunitat Valenciana a lo que los independentistas catalanes llaman Països Catalans”.
Además, en relación a esta visita y al error cometido en la convocatoria de prensa al anunciar la presencia de “Enric Amelgar” en lugar de “Enric Porcar”, Vicent Sales también ha pedido al conseller de Educación que “vigile cómo traducen desde la Generalitat los comunicados de prensa ya que parece que el SALT les ha jugado una mala pasada y les ha hecho cometer un error ridículo”.
Por último, desde el Grupo Municipal Popular observan con preocupación estas declaraciones y desencuentros pues evidencian que “la ciudad está siendo dirigida por una bicefalia en la que ya salen a relucir determinados egos y que resultará muy perjudicial para el desarrollo y el futuro de Castellón y la estabilidad política que la ciudad necesita”.
