Carrasco: «Después de 2 años se ha demostrado que el Pacte del Grau es el Pacte del Frau»
“Dos años marcados por el desgobierno, el autoritarismo y el descrédito por tanto incumplimiento de un bipartito débil, secuestrado por la izquierda radical. Ineficaz e ineficiente ante las necesidades ciudadanas»
Recién cumplido el ecuador de la legislatura, el Grupo Municipal Popular ha hecho balance de los dos años de gestión del gobierno entre socialistas y nacionalistas, apoyados por la izquierda radical de Castelló en Moviment- Podemos.
Carrasco: «Las trifulcas internas, el enchufismo, la opacidad, las promesas en el aire y la subida de impuestos caracterizan la legislatura»
La portavoz popular, Begoña Carrasco, confirma: «Lo que bautizaron con el nombre de Pacte del Grau, se ha convertido en el Pacte del Frau, un fraude de pacto y un fraude de gobierno. Dos años perdidos para Castellón, marcados el desgobierno, el autoritarismo de la alcaldesa y el descrédito de un bipartito débil, que además está secuestrado por la izquierda radical. Ineficaz e ineficiente ante las necesidades ciudadanas».
«Su gestión ha estado marcada por las trifulcas internas, porque el Ayuntamiento es la Casa de los líos. Hay recelos y competencia entre 2 equipos (PSOE y Compromís) y luego está el mando a distancia de Castelló en Moviment. Son dos equipos donde cada uno gobierna para los suyos».
Para los populares, estos recelos y envidias provienen en parte de los enchufismos, tanto por parte de socialistas, como de nacionalistas. «Lo hemos visto con el gerente de Deportes (dedazo de Compromís); con el gerente de Fiestas (dedazo de PSOE); con el coordinador de Urbanismo (dedazo de PSOE); con el Intendente General de la Policía Local (dedazo de PSOE) y con el director de una oficina de Planificación Económica que no sabemos a qué se ha dedicado hasta la fecha (dedazo de la alcaldesa, es el caso Lafuente que cuesta a los castellonenses 90.000 euros al año).
Para los populares, la subida de impuestos es otro claro ejemplo de incompetencia. «Recaudan más e invierten menos, no repercute ni en la ciudad, ni en los castellonenses. Este año recaudarán un millón más con el IBI; entre 4 y 9 euros más se incrementará el recibo de basura y, pese a seguir subiendo impuestos, sacan pecho de su gestión. Su afán por recaudar más les ha llevado a cerrar el 2016 con 30 millones de euros en el banco sin gastar, casi el 20% de lo recaudado. No invierten en Castellón, pero sí gastan 765.000 euros en 18 empleados de confianza y 868.000 euros en autobombo. Acaban haciendo lo que dijeron que nunca harían».
La rebeldía de la alcaldesa, unida a sus promesas en el aire, «que son incapaces de materializar como: acabar con los desahucios; crear la bolsa de vivienda; aprobar el PGOU; el Plan Estratégico de Turismo; crear la Oficina de la Discapacidad; abrir el kiosco de La Paz; el nuevo centro de Alzheimer; además de prometer no aplicar recortes ni en Sanidad ni en Educación, han puesto en evidencia su ineficacia e ineficiencia, decepcionando a quienes confiaron en ellos».
«Y la opacidad que he hemos tenido que denunciar al Síndic de Greuges, por su falta de transparencia al negar información a los ciudadanos, se suman a su inacción y parálisis de gobierno. Recientemente hemos conocido que esta denuncia, por falta de transparencia, ha sido admitida a trámite por este alto órgano autonómico».
Los firmantes del Pacte aseguran haber ejecutado un total de 95 de las 410 acciones acordadas, sólo un 23%. Un recuento que además carece de veracidad cuando se alude a Castellón, como ciudad libre de desahucios o cuando hablan de una oficina municipal para personas migrantes; una oficina, AMICS, que funciona desde hace años.
